La benjamina del clan Kardashian-Jenner, Kylie Jenner, y el rapero Tyga han venido protagonizando en los últimos dos años una mediática relación -con sus altibajos y rupturas temporales incluidas-, que en su momento no recibió precisamente el visto bueno de sus más allegados, ya que la estrella televisiva confiesa ahora que los amigos de su novio fueron los primeros en recomendarle que se mantuviera alejada de él.

"El primer año que empezamos a salir, todo el mundo del entorno de Tyga le dijo que era mejor que no estuviera conmigo, y a mí me aconsejaron lo mismo. Todavía me llegan comentarios del tipo: 'No sigas con él'. Pero nuestra relación no se basa en lo que piensen los demás, sino en el hecho de que nos queremos. Necesitamos estar juntos siempre. Nunca nos cansamos el uno del otro, simplemente queremos afianzar nuestro vínculo", afirma Kylie en conversación con la revista Complex.

Una de las razones por las que sus respectivos entornos se llevaron las manos a la cabeza al enterarse del romance reside en el hecho de que Blac Chyna -prometida de Rob Kardashian, con el que espera su primer hijo juntos- no solo había mantenido anteriormente una turbulenta relación con Tyga, sino que con él tuvo a su primogénito King Cairo (3).

"No llegué a pelearme con ella en las redes sociales, como algunos han dicho, pero entiendo la posición en la que Chyna se encontraba y cómo se sentía. Estamos bien.Todo es amor entre nosotras", confiesa a la misma publicación.

A pesar de que, al igual que sus famosos hermanos, se encuentra bajo un escrutinio mediático constante que le ha llevado a vivir toda clase de experiencias, Kylie asegura que no podría sentirse más orgullosa del tipo de familia del que forma parte.

"Es más fácil para mí que para otras personas. He atravesado tantas puertas. Jamás diría que odio mi vida. Soy feliz. Pero [se hace duro] todo lo que viene con la fama, como los paparazzi y no poder hacer cosas normales. He sido famosa toda mi vida. Me gustaría saber qué se siente al no serlo. La fama no es algo malo en sí mismo, pero crecer ante las cámaras sí es difícil. No sabes quién eres. No sabía quién era hace un año y todavía no lo tengo claro. Intentas crecer y cometer errores mientras todo el mundo tiene la atención puesta en ti", explica.