Aunque la cantante Anahí intenta desempeñar de la mejor manera posible su papel de Primera Dama del estado de Chiapas (México) tras casarse con el gobernador Manuel Velasco Coello, de joven jamás se habría imaginado que su vida acabaría ligada a la política.

“Estoy en paz, feliz y con una gran responsabilidad por estar casada con el gobernador, pero uno no nace sabiendo con quién se casará, si será cantante, banquero, taquero o político. Estoy con él desde antes de que fuera gobernador y ahora asumo con mucho amor el ser su esposa”, explica la intérprete en una entrevista a Revista Central.

Uno de los aspectos que más valora la mexicana de su matrimonio es que, además de pareja, ella y Manuel son ante todo compañeros y muy buenos amigos.

“Antes que nada somos mejores amigos. Me casé con el hombre de mi vida y con quien sé que jamás me fallará, ni yo a él”, añade.

Sin embargo, Anahí es consciente de que no todo el mundo conoce el lado “sensible” de su marido, algo que le apena bastante a pesar de que sabe que son gajes del oficio.

“Es muy noble y eso tal vez no lo vemos mucho porque por la responsabilidad de su trabajo tiene que ser muy serio, pero en la privacidad de nuestro hogar es muy sensible y humano, con sentimientos hermosos. Siempre soñé con tener un hombre bueno a mi lado y gracias a Dios lo encontré”, añade.